José Trinidad Cabañas Fiallos nació el 9 de junio de 1805 en Tegucigalpa y falleció el 8 de enero de 1871 en Comayagua. Fue un destacado militar y político hondureño, presidente de la República de Honduras de 1852 a 1855. Conocido por su integridad y defensa de las ideas liberales, apoyó fervientemente la unión de Centroamérica.

Juventud

Desde joven, mostró su compromiso con la causa liberal. En 1827 cuando las fuerzas de Justo Milla invadieron y situaron Comayagua y derrocaron al Gobierno de Dionisio de Herrera, Cabañas, prestó su cooperación en defensa del gobierno; se presentó ante Dionisio de Herrera con sus tres hijos y dijo: «Señor, el peso de mis años no me permite acompañaros al campo de batalla pero aquí tenéis a mis tres hijos que pueden lo que yo debiera hacer, dispuestos a derramar su sangre al pie de la bandera que defendéis» Fue así como ingresó al ejército de la República Federal de Centroamérica, donde fue lugarteniente del General Francisco Morazán y llegó a ser general del Ejército federal, ganando liderazgo político y militar, lo que le valió ser Diputado de la Asamblea Constituyente de 1830.

Durante su presidencia

Promovió la educación, la agricultura y la minería.
Implementó reformas significativas, como la mejora de la instrucción pública, el impulso del cultivo del café y la construcción del ferrocarril. Fue conocido por imponer impuestos a la exportación de ganado y madera para financiar las primeras 50 escuelas públicas del país.

Cabañas mantuvo una amistad leal con Francisco Morazán, a quien llamaba "Mi Amado General". Tras la muerte de Morazán, Cabañas expresó su profundo descontento y continuó su lucha por la unión centroamericana. Durante los últimos años de su vida, se retiró de la política y regresó a Honduras, donde inició una campaña contra la presencia de William Walker en Centroamérica. Falleció en 1871 y fue honrado como "Soldado de la Patria" por el gobierno de Honduras. Sus restos descansan en la Iglesia de San Sebastián de Comayagua.